¡Estamos viajeros a tope, bosquienanos! ¿Por qué quedarse aburrido en casa cuando puedes embarcarte en las carabelas de Colón y partir rumbo a las Américas? ¡En serio! En Palos de la Frontera puedes visitar un puerto con una recreación muy exacta (avalada por historiadores muy serios y sesudos) de la Pinta, la Niña y la Santa María. Incluso puedes subir a bordo, es una pasada. Puedes colocarte en la proa e imaginar el Atlántico frente a ti, o bajar a la bodega (¡qué estrecha!) y entrar en el camarote del señor almirante Cristóbal Colón (que no es precisamente muy lujoso). De la experiencia aprendimos sobre todo una cosa: ¡las carabelas eran más pequeñas de lo que imaginábamos! Madre mía, treinta hombres metidos ahí durante dos meses tenía que ser un agobio...
Pero como nosotros hicimos el "viaje" solitos, fue más cómodo y emocionante. Os dejamos con las fotos, para que os animéis a visitarlas.
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| Una vista desde la borda de La Pinta |
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| El Monasterio de La Rábida |
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| No sabemos si América está para allá, pero bueno... |
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| Creo que me subiré en éste |
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| En el puerto |
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| ¡Ya se ve América! (creo) |
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| En las bodegas ¡Qué incómodo! |
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| El señor Colón, muy atareado. No lo molestemos |
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| Aquí dormía Colón. Y eso que era el jefe... |
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| Uno de los marineros, haciendo carpintería |
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