Aprovechando los últimos días del año para salir a otra de nuestras excursiones, nos dirigimos hacia el embalse de La Portiña, en el término municipal de Talavera de La Reina. El día amaneció soleado (como suele estar ocurriendo últimamente, pese a que no debería ser así en estas fechas...) y algo frío, pero no excesivamente, a veces hasta podíamos despojarnos durante un rato del abrigo...
Decidimos ir para allá para llenarnos de Naturaleza y poder ver aves, no en vano es muy buen sitio para disfrutar de la observación de todo tipo de aves acuáticas y de otras. Pudimos ver un gran despliegue de ellas en las dos horas escasas que anduvimos por allí: dos martines pescadores al vuelo rasante, abubilla a pocos metros, estorninos, colirrojos, petirrojos, mosquiteros, alondras, gorriones, rabilargos, urracas, milanos, gaviotas, cormoranes, fochas, azulones, reyezuelos, pinzones, carboneros, lavanderas, mitos, verdecillos, cigüeñas, tarabillas, currucas, mirlos, palomas, tórtolas y muchas más... aunque sin lugar a dudas durante otra época del año seguramente haya más actividad, no nos podemos quejar tampoco. Y no solamente nos fijamos en las aves, por supuesto, cualquier otra cosa natural que aparezca llama igualmente nuestra atención. Nos sorprendió bastante encontrarnos en algunos puntos con numerosos rodales de setas, teniendo en cuenta que casi, casi estamos en enero.
El sitio está muy bien preparado para la observación de aves. Cuenta con varios observatorios en diferentes puntos de la ruta y con mesas y bancos para el descanso o para comer. Además es una senda muy transitable y fácil de hacer que discurre todo el tiempo de forma paralela al embalse, pudiéndonos acercar bastante a su orilla. No tiene marcas indicativas, pero no se hacen necesarias, ya que el camino es muy intuitivo y sencillo. Aproximadamente en dos horas se puede recorrer todo el trayecto en una ruta circular sin pérdida. Cuenta también con numerosos carteles (algunos en mejor estado que otros) y con una zona para dejar el vehículo. Grandes eucaliptos, pinares y encinares junto con matorral bajo tapizan los alrededores. Durante el verano no debe de haber mucha sombra, pese a que hay bastantes árboles el embalse está muy despejado, por lo que es mejor escoger otro momento para visitarlo.
Con la intención de pasar una agradable mañana no íbamos con la idea de hacer muchas fotos, pero algunas pudimos traernos... ahora mismo las compartimos con todos vosotros. Ya sabéis que para verlas en grande solamente hay que pulsar sobre ellas.
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