Más sobre Educación Ambiental

La Educación Ambiental hoy por hoy es una asignatura pendiente en muchos sentidos: no solo hay que plantar la semilla de la concienciación ecológica en la sociedad, también hay que regarla para que arraigue y crezca fuerte y bien derecha. El público al que dirigir nuestro mensaje no se centra exclusivamente en los niños o adolescentes, otros colectivos ya con unas ideas más formadas necesitan igualmente de ese amparo natural que ofrece nuestro entorno, y deben aprender a cuidarlo, puesto que en muchos casos algunos adultos no tienen bien asimilado el concepto de preservar el medio ambiente.

 

Para conseguir conectar con los adultos, podemos recurrir a evocar los recuerdos que el campo generó en muchos de ellos cuando eran niños. Los lugares rurales, más en comunión con la Naturaleza, son un buen marco para trasladar nuestro mensaje. Con los niños pequeños salir al campo con ellos les hará conocer más a fondo cosas que quizás no han visto nunca y que de otra manera sería imposible que contemplasen. Llegar a involucrar a los chavales parece a priori más sencillo, y en algunos casos es así. En otros, el Educador Ambiental parte en desventaja, puesto que los niños de hoy en día poco contacto tienen con la Naturaleza, salvo excepciones. Asumir este reto de empaparles al máximo de cariño hacia lo salvaje es motivador y enriquecedor, tanto para los propios niños como para el Educador, que tendrá que desplegar sus mejores talentos y técnicas para alcanzar su objetivo. Muchas veces no se trata de que aprendan de carrerilla todo lo que el Educador les va contando y luego sean capaces de recordarlo, sino que es mucho más importante que VALOREN y CUIDEN el medio, porque los conocimientos, siendo necesarios, pueden relegarse a un segundo puesto. Podemos amar lo que nos rodea y no llegar a conocerlo todo... el mundo está plagado de misterios, de sitios recónditos que pocos han visto... aunque cada vez son menos los lugares en los que el hombre no estampa su huella. Esto daría lugar a otra entrada CONOCIMIENTO vs. SENTIMIENTOS, pero será relatada en otra ocasión.

 

 

Para poder ejercer bien el papel de Educadores Ambientales se necesita:

 

- Paciencia

- Empatía

- Implicación

- Conocimientos

 

 

 

Pero lo principal es que...

    

 

... La Educación Ambiental se lleva a flor de piel, hay que SENTIRLA, VIVIRLA, QUERERLA y PROTEGERLA, MIMARLA y ALIMENTARLA.