Nos disponemos a emprender una excursión más o menos larga por el bosque e intentaremos disfrutar de ella. Pero lo primero que debemos hacer es equiparnos de modo conveniente. Fijaremos antes nuestro destino y, dependiendo de a dónde nos dirijamos, seleccionaremos las cosas para llevarnos. Es importante que llevemos sólo lo que realmente vamos a necesitar, evitando infinidad de cosas superfluas que lo único que harán será cargar nuestra mochila en exceso. Después de varias horas de marcha nuestra espalda lo agradecerá.
Una vez en nuestro destino descargaremos el equipaje y nos dispondremos a disfrutar de las maravillas que nos brinda la naturaleza. El éxito o el fracaso de la excursión dependerán de cómo hayamos hecho los preparativos.
Recordaremos brevemente todo lo que vamos a necesitar para aprovechar plenamente todos los momentos en el campo.
Lo primero que conviene saber es tanto la altitud como el clima y las previsiones meteorológicas del lugar a donde vamos. También debemos prever cuánto tiempo vamos a quedarnos en la zona, no es lo mismo una excursión de dos días que una de dos semanas.
- El calzado
Es uno de los elementos fundamentales en cualquier salida al campo. No es necesario llevar pesadas botas de montaña hechas para escalar si vamos a hacer una travesía por un sendero poco escarpado. Tampoco hemos de caer en el extremo opuesto y llevar solamente unas zapatillas de deporte o unas playeras. Unas botas de tipo "trekking" están fabricadas para vencer los obstáculos naturales y son ligeras y fuertes. Al elegirlas tenemos que mirar bien el número para que nos sujeten el pie sin que nos lo aprieten demasiado.
- Los calcetines
Conviene que sean de lana o, en su defecto, de algodón, o bien una combinación de ambos tipos. Lo que nunca han de ser es de fibra sintética.
Es aconsejable también llevar un par de calcetines de repuesto siempre en la mochila, aunque la salida que vayamos hacer sea de poco tiempo. Muchas veces las sendas atraviesan por lugares en los que nos podemos mojar los pies.
- La cantimplora
O también es útil una botella metálica que venden en tiendas de productos de senderismo.
La cantimplora debe ser de aluminio con forro de fieltro verde, pues al mojarlo mantiene el agua fresca. Su cierre a rosca es perfecto para evitar que se derrame en la mochila. No utilizar nunca una cantimplora de plástico, deja un terrible sabor al agua y resulta difícil de limpiar.
- La mochila
Su tamaño dependerá de la duración de la excursión. Las hay de muchos modelos acordes con el tipo de salida que tengamos pensado hacer. Las que reparten el peso entre la espalda y las caderas son muy aconsejables para hacer más llevadera la carga. Los amarres y sujeciones son buenos elementos que debemos mirar en las mochilas.
- La ropa
Sobre todo: nada de fibras artificiales. La ropa nunca debe apretar, ha de quedar siempre un poco holgada. Hoy en día hay multitud de tejidos utilizados para diseñar la ropa de montaña que ofrecen muchas ventajas, como poder resistir mejor el frío o crear cámaras aislantes al aire.
Los colores para elegir deben de ser lo menos llamativos que se pueda a la hora de pasar lo máximo posible desapercibidos entre la vegetación del sitio.
No debe faltar nunca un chubasquero. Aunque las predicciones del tiempo no den necesariamente lluvias, el clima de montaña favorece en muchos casos que se den tormentas o aguaceros inesperados. El chubasquero, plegable y guardado en su bolsa, nos puede evitar más de un disgusto.
- Otros elementos
Lámparas de camping gas; pequeña cocina que funcione también con camping gas (en el bosque no se debe encender nunca una hoguera) platos; vasos y cubiertos de aluminio, una cuerda, un cordel de varios metros; un termo; una navaja; un abrelatas; saco de dormir y un botiquín de primeros auxilios.
Otras cosas que llevar: útiles de aseo personal, más ropa además de la ya descrita, comida, bolsas para guardar residuos.
EN EL PRÓXIMO CAPÍTULO...
MÁS COSAS PARA NUESTRO EQUIPO DE SUPERVIVENCIA.
No hay comentarios:
Publicar un comentario