Querido Pascal: ya sé que en verano hace calor, pero imagina el susto que se me metió en el cuerpo cuando el otro día, al ir a ver el termómetro en casa de un amigo, vi que marcaba ¡98,6 grados! Él me dijo que es que medía en otro sistema, pero no supo explicármelo mejor. ¿Podrías tú, que eres tan listo? Atentamente: Calorina Grande.
Querida Calorina, gracias por lo de listo, pero yo solo lo hago para ayudaros con las cosas de números que se os atraganten. El termómetro de tu amigo (que estoy casi seguro que es estadounidense) mide la temperatura en grados farenheit, mientras que tú (y el resto del mundo) usamos la escala conocida como celsius. Es un asunto algo lioso, porque las dos escalas usan valores diferentes, y un grado farenheit no "vale" lo mismo que un grado Cclsius. Es decir, si la temperatura sube un grado farenheit, es un incremento menor que si sube un celsius.
¿Y por qué este barullo? Todo empezó en 1724 cuando Daniel Gabriel Farenheit, un físico polaco, quiso crear una escala para medir temperaturas. Quiso poner el punto cero en lo más frío posible, y lo más frío que consiguió fue una mezcla de hielo, agua y cloruro de amonio. Luego se tomó su propia temperatura un día que tenía fiebre, y le pareció bonito decir que eso que marcaba eran 100 grados Farenheit. Su idea, desde luego, era no tener que usar números negativos, pero su buena intención acabó en chasco, porque evidentemente hay cosas mucho más frías que la mezcla de hielo, agua y cloruro de amonio, y al final los farenheit también tienen temperaturas negativas.
La escala celsius se la debemos a Anders Celsius, un físico sueco. En 1742 quiso plantear una forma más sencilla de medir las temperaturas, y cogió como referencia el punto en que el agua se congela y el punto en el que hierve, designándolos como 0 y 100 grados celsius ¡Solo que él los puso al revés! Es decir, según él, el agua se helaba a 100ºC y hervía a 0ºC ¿No sería más lógico como lo usamos hoy, señor Celsius? Gracias a Dios, al final se corrigió este capricho...
La escala Celsius es la que más ha triunfado a nivel cotidiano, aunque tiene el inconveniente de tener que usar números negativos para cosas más frías que el punto de congelación del agua (algo que a lo mejor no te importa si vives en el Caribe, pero que tendrás que asimilar si te mueves por Moscú).
Pero ¡un momento! Existe una tercera forma de medir la temperatura, que es la escala Kelvin (por William Thomson Kelvin, físico inglés, en este caso). En este caso, el 0 se asigna a la temperatura más baja posible... Dirás que esto te suena a lo que hizo el bueno de Gabriel, pero es que en este caso sí que es LA TEMPERATURA MÁS BAJA POSIBLE DE VERDAD DE LA BUENA. Los 0 Kelvin se corresponden con la temperatura a la que un electrón se quedaría inmóvil, y todas nuestras fórmulas nos dicen que es algo teóricamente imposible de conseguir. Podrás acercarte a la millonésima de kelvin, pero no al cero. Por cierto, un kelvin corresponde "en cantidad" a un celsius, pero no a un Farenheit.
¿Y cómo hago para cambiar de un sistema a otro? ¿Cómo de calor son 98,6ºF? Hacer el cambio de kelvin a celsius es fácil: sólo tienes que restar 273 (si nos ponemos puntillosos, 273,15). O dicho de otro modo, los cero kelvin (también llamado cero absoluto) serían -273º (vaaale, -273,15º). Para ir de Celsius a kelvin, pues al contrario: el agua, por tanto, se hiela a 273K.
Pasar de farenheit a celsius requiere un poco más de mates. A la cifra que tengas debes restarle 32, el resultado multiplicarlo por 5 y luego dividir todo por 9. Salvo que seas muy bueno, no es algo para hacer de cabeza, desde luego. Si te molestas en hacer las cuentas, verás que 98,6ºF corresponden a 37º, que también es calor, también...
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