Con ganas de hacer más rutas por el campo en pleno otoño, estuvimos recorriendo una senda por Moralzarzal conocida como de "La Chorrera del Covacho". El día que elegimos se presentó muy nublado y aparentemente lluvioso, pero nos respetó toda la mañana sin abrir el paraguas, solamente unas cuantas gotas amenazantes, pero que no descargaron de pleno hasta que ya estábamos en casa por la tarde. Se notaba el aletargamiento en el que poco a poco va entrando el monte y la inactividad reinaba por todos los rincones, no siendo por algunos rabilargos, herrerillos capuchinos o petirrojos que nos animaban a seguir caminando. Es época de berrea, eso sí, y de especies como la grulla y otras aves que en sus migraciones podemos contemplar por nuestras latitudes.
Os emplazamos a las siguientes entradas para contaros el resto de la crónica de ésta y otras jornadas, en las que sin duda nos perderemos por plena Naturaleza para disfrutar de esta recién estrenada estación.
Aquí nos quedamos de momento...
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