Hoy queríamos salir al campo, pero teniendo en cuenta la situación por el coronavirus, decidimos hacerlo en un sitio cerquita y sin gente. Así que repetimos la senda de Los Molinos en Navalagamella, que ya visitamos allá por el 2014 (¡ya ha llovido!).
Se trata, como ya os contamos, de una senda fácil (solo el primer tramo tiene cierta pendiente), muy bonita y en la que es fácil ver aves e insectos. Se comienza en el aparcamiento de El Hondillo; en el GPS podéis poner la calle de San Sebastián o la calle de Las Eras como referencia. Una vez comenzada, aunque no hay señalización, no es complicado seguirla. La ruta es circular y nosotros nos la hemos terminado en aproximadamente tres horas, con paradita para almorzar. Eso sí, nos ha hecho calor, y hay tramos donde falta sombra. Tampoco esperéis fuentes, por lo que quizás no sea buena idea hacerla en verano.
La mañana nos ha deparado muchas sorpresas: varias especies de mariposas (Pieris brassicae, Zerynthia rumina y Lasiommata megera, entre otras), esfinge colibrí, una curiosa mariquita que hemos identificado como Adalia bipunctata, mirlos, pinzones, jilgueros, golondrinas, urracas, estorninos, gorriones, rabilargos, abubillas y una lagartija roquera (Podarcis muralis). Os dejamos con algunas de las fotos de la jornada. ¡Esperamos que os gusten!
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