Desde este nuevo blog podréis conocer muchas cosas relacionadas con el Medio Ambiente: cómo caminar por la montaña, rutas de senderismo, curiosidades de flora y fauna, experiencias y anécdotas vividas... y un sinfín de ideas útiles que nos brinda cada día nuestra Naturaleza.

viernes, 10 de abril de 2015

Diez días por Marruecos: el Atlas, el desierto o el Antiatlas...

Amanece en el desierto un día más, y la luz del sol nos permite ver las dunas que rodean el Ryad Nomad Palace, dunas que en la noche del día anterior nos pasaron desapercibidas. Como nos levantamos pronto, nos da tiempo a sacarnos algunas fotos con unos dromedarios antes de ir a desayunar.
 
Con nuestros exiguos equipajes ya dispuestos, subimos al todoterreno, conducido una vez más por Dawid, y nos volvemos a adentrar en el reg hacia un punto donde nos espera un yacimiento de trilobites ordovícicos. Nos sigue asombrando la exactitud de esta gente a la hora de orientarse en un paisaje tan carente de puntos de referencia, al menos para nuestros inexpertos ojos. Y por si eso fuera poco mérito, los guías nos encuentran después una sombra donde poder pararnos a comer, porque hoy el almuerzo toca en el campo, y está el día como para quedarse al sol. Así que conseguimos apiñarnos cuarenta personas en la sombra de tres acacias para dar cuenta de algunos espárragos, mejillones y algo de embutido. No es precisamente un menú de alta cocina, pero como dice el saber popular "en el campo está todo rico".
 
Por la tarde, una visita a otro yacimiento fosilífero, nada menos que restos de corales del Devónico, y más tarde podemos visitar una mina de goethita, un mineral ferruginoso, pesado y negro, que suele presentarse en hábito botroidal (como si formara burbujas en la superficie de la roca). Quien más, quien menos, todo el mundo rebusca un poco en la escombrera para llevarse su trozo de goethita. Aprovechamos también para comprar algunos fósiles a una familia asentada junto a la mina, y regalamos nuestros prismáticos (unos sencillos y pequeñitos que llevábamos para el viaje) al chaval de la casa.
 
La luz del día se nos va, y Pablo y Nico apremian para que emprendamos el camino de regreso. Al volver al Ryad nos encontramos con que el comedor está atestado de gente, lo que ocasiona no poco caos a la hora de encontrar una mesa libre y poder cenar.
 
Pero ni siquiera con esto acaba el día, porque después de la cena hay que volver a subirse a los coches para dirigirse al campamento de jaimas donde pasaremos la noche. En el camino, ya noche cerrada, algún coche se queda atascado en el difícil terreno arenoso, pero finalmente logramos llegar a nuestro destino, donde nos reciben con música y cantos de bienvenida.
 
Quizás nosotros habríamos preferido algo más tranquilo y "rústico", pero el cansancio y lo bonito del lugar hacen que perdonemos el jaleo de más de cuarenta personas intentando distribuirse entre las tiendas, y pronto nos metemos en la que nos asigna Pablo, compartiéndola ¡qué casualidad! con nuestros compañeros de coche, Paloma y Lucio. No hace falta decir que caemos rendidos rápidamente ¡Mañana toca madrugar para ver amanecer rodeados de dunas!

Y por supuesto que os enseñamos las fotos de este día:
 



En pleno desierto...

En el hotel
 
 
 
 
 
 
 
... también hay mucha agua...
 

Piscina del hotel donde nos alojamos
 
 
 
 
 
 
... y estampas tan típicas...
 

 
Dos dromedarios en las dunas
 
 
 
 
 
 
 
... que nos hacen fotografiarnos...
 
 

Dani junto a un dromedario
 
 
 
 



... para vernos la cara...


De perfil
 
 
 
 
 
 
 
 
... o desde lejos comprobar...
 


Escena en el desierto
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 ... que todo pasa...


Más fotos del desierto en Marruecos
 
 
 
 
 
 
 
 
 ... ante nuestros ojos...


Dos dromedarios descansando
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 ... con mucha armonía...


Preciosa imagen en la arena
 
 
 
 
 
 
 
 
... y entonces nuestras miradas...
 


Dani entre las dunas
 
 
 
 
 
 
... se detienen una vez más...
 


Muy tranquilo el dromedario
 
 
 
 


 
... y seguimos sonriendo...


Almu en el desierto
 
 
 
 
 
... y volando alto...
 
 
Un gorrión moruno
 
 
 
 
 
 
 
... permanecemos atentos...
 
 
Primer plano
 
 
 
 
 
 
 
 
... a la vida en el desierto...
 
 
En el hotel
 
 
 
 
 
 
 
... que siempre transcurre...
 


Almu en el hotel antes de partir
 
 
 
 
 
 
 
 
 
... con grandes metas...
 
 
Vehículos en pleno desierto
 
 
 
 
 
 
 
... en viajes inolvidables...
 
 

Entre los todoterrenos
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 ... llenos de buenos momentos...


Almu en el todoterreno
 
 
 
 
 
  
 
 
 ... y entre piedras...


Muchas rocas en el desierto
 
 
 
 
 
 
 
 
 
... hay paisajes insólitos...
 


Formación geológica del desierto
 
 
 
 
 
 
 
 
 
... y continuamos con más Geología...
 
 
Rocas muy interesantes
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 ... todos muy atentos...


El grupo en el desierto
 
 
 
 
 
 
 
 
 
... a cantidad de cosas...
 
 
Una langosta en el desierto - I -
 
 
 
 
 
 
 
 
 ... que saltan ante nuestros ojos...


Una langosta en el desierto - II -
 
 
 
 
 
 
 
... o que admiramos sin más...
 

 

Una planta en el desierto
 
 
 
 
 
 
 
 
 
... porque la vida bulle...
 
 

Pequeña oruga
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 ... por todas partes...


Otra flor más
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 ... ya que en el desierto...

Planta adaptada al calor
 
 
 
 
 
 
 
 
... aguardan muchas sorpresas...
 
 
Huellas en la arena
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 ... y bien preparados...


Para combatir el polvo y el calor del desierto
 
 
 
 
 
 
 
 
... proseguimos observando...
 
 

Otra formación geológica
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 ... más Geología en estado puro...


Paisaje de rocas
 
 
 
 
 
 
 
 
... y ya toca comer...
 
 

Comida de campo a la sombra de una acacia
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
... y mientras vemos más huellas...
 


Rastros en la arena
 
 
 
 
 
 
 
... la noche nos espera... 
 
 

Dormiremos en una jaima parecida a esta
 
 
 
 
 
 
... y viviremos más aventuras
en pleno desierto.
 
 
Todavía queda mucho por contar...
 
 
 
 
 
 

1 comentario:

  1. Vaya que bien os lo pasaís , Almu tú siempre conb la cámara, para deleite después de tus amigos

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